Autoridades estadounidenses reforzaron el operativo establecido para detener la oleada de migrantes en las costas de Florida luego de la llegada de más de 5.000 haitianos y cubanos en los Cayos.
Ante esta situación, hay una mayor presencia de fuerzas del orden y socorristas en el área, con el fin de evitar que los migrantes ingresen ilegalmente a Estados Unidos. Se han producido 300 desembarcos de migrantes aproximadamente y se identificaron más de 310 embarcaciones para su remoción.
Generalmente, ciudadanos cubanos cruzan el océano en débiles embarcaciones, que generalmente son interceptadas por la Guardia Costera antes de llegar a territorio estadounidense, y en ese caso son deportados a su país.
Unos pocos logran tocar tierra en Estados Unidos y por lo tanto, puede solicitar asilo, mientras que otros no logran ese objetivo y perecen en el mar, generalmente como consecuencia de un naufragio.
Desde el 1 de octubre de 2022, inicio del año fiscal, hasta los primeros días de enero, la Guardia Costera norteamericana interceptó a más de 5.000 migrantes en la zona de los Cayos, a unos 250 kilómetros al sur de Miami.
Según cifras de las autoridades estadounidenses, en el año fiscal 2020 fueron, sólo 49, los inmigrantes cubanos interceptados. En 2018, el número llegó a 259, mientras que en 2017 y 2016 se interceptaron en el mar a 1.468 y 5.396 cubanos, respectivamente.
La Embajada de Estados Unidos en La Habana había alertado que iba a reforzar la vigilancia en el Estrecho de Florida, con vistas a afrontar el aumento de la migración marítima irregular. Así como declaró que la crisis migratoria se ha vuelto una preocupación para la Seguridad Nacional.
Fuente: NA